Vaciaré el vaso de este año,
sorberé el último trago,
paladeando sus notas,
tiernas e indefinidas,
del vino de la vida…

Ése que da felicidad,
algunas veces
y tristezas otras.

Bebiendo hasta el final,
hasta la última gota,
del vino que vino un día,
para quedarse 365 días.
y se quedó hasta hoy.

A las doce en punto,
aparecerá otra copa…
¿ Cómo será su vino,
hecho de horas y días,
oloroso, joven, dulce,
maduro con cuerpo, ligero…?

¿Cómo será este año,
el vino de la vida,
en su nueva copa,
almacenado y contenido?

! Sólo sé que lo beberé ,
hasta su última gota !
arrojando lejos la copa,
que se romperá en pedazos,
manchados de vino y vida.

Hasta el año que viene.