Quién no escribió un poema,
huyendo de la soledad,
quien a los quince años,
no dejó su cuerpo abrazar.

Y quién cuando la vida se apaga
y las manos tiemblan ya,
quién no buscó ese recuerdo,
de una barca naufragar.

Mari Trini

Feliz descanso y mucho ánimo.