KAFKA EN BARCELONA

La Asamblea Nacional Catalana reparte masivamente estos días dosis de burundanga para motivar las calles barcelonesas: esa escopolamina que disuelve la memoria (incluso la histórica) y somete por intoxicación química las capacidades cognoscitivas.

Este pensamiento circular y circulante establece el advenimiento del día en que Cataluña será independiente tras 800 años de opresiva ocupación española. España siempre ha descolonizado mal pero se ignoraba que tras la bochornosa evacuación de Seguia el Hamra y Río de Oro nos quedara algún territorio colonial pendiente de la autodeterminación de sus aborígenes.

Para mayor abundamiento la ANC es cabeza tractora de la Confederación de Entidades Soberanistas de los Países Catalanes, aditivo de la burundanga.

Martín Prieto ( La Razón )