
LA NAVIDAD MOLA
¡Ya han llegado tus cuñados!
¡Ya está aquí tía Rosario,
con el perro y el canario!
Todos vienen de invitados,
y no traen, los condenados,
más que el hambre, que es inmensa.
–Tía: usted, que es hipertensa,
¿quiere caldo, que es ligero?
–Ponme pierna de cordero,
que la he visto en la despensa.
¿Y los niños? ¡Qué alegría!
Primos, nietos y sobrinos,
abundantes como chinos,
en constante algarabía:
–Id al cuarto de la tía
con la flauta y el tambor.
Id a hacerle ese favor,
que está echándose la siesta…
(Y la tía, si se acuesta,
luego, está de mal humor).
¡Felices Pascuas, lectores!
¡Felices Pascuas, lectoras!
Pasen muy felices horas
con mayores y menores,
y fomenten los valores
de la Navidad Cristiana.
Fíjense que, esta semana,
no hay disputa por escrito.
¡Al contrario: felicito
al colega con sotana!
Monsieur de Sans-Foy
Libertad Digital