
Estamos ante unas subidas históricas de la luz por tener, entre otras cosas, pocas eléctricas o por estar controladas las mayores y mejores por la plutocracia poniendo el precio de la luz como a ellos les da la gana. Lo cogemos o lo dejamos. Aunque bien es cierto que todo sube a gusto de la oligarquía de turno.
Ya lo he dicho otras veces, contra más autosuficiente sea un país más libre se hará de la plutocracia. Precisamente ellos no quieren eso, de ahí la adoración estúpida que nos hacen tener por la economía capitalista con su libre comercio, libre cambio y finalmente »manos invisibles» dirigiendo la economía de un país y a la larga esclavizando de paso a todo un planeta.
Las grandes multinacionales tienen más dinero que todo el producto interior bruto de un país señores y, entonces, vamos a ver, ¿cómo controlamos esos imperios y hacemos para que no nos controlen a nosotros?. Porque el que controla la economía mundial controla la política. No, se les tiene que poner unos límites. En todo tiene que haber un cierto equilibrio y unos límites contra la posible codicia humana. Límites políticos y económicos.
La solución a los problemas económicos españoles no pasa tampoco por depender y pedir dinero a la UE o a organizaciones supranacionales parecidas controladas por la banca internacional, pasa por que lo moral y lo justo estén siempre por encima del beneficio material y sean base de nuestras vidas (caridad cristiana), pasa por reducir y acabar drásticamente con los gastos estatales superfluos y absurdos (políticos, autonomías, etc…), pasa por crear un sistema corporativo, pasa por nacionalizar la banca y los recursos básicos, pasa por reconstruir el tejido industrial, pasa por desarrollar como es debido la energía nuclear y térmica (las energías renovables son un fracaso), pasa por tener más autónomos con su pequeña-mediana empresa y no arruinarlos como ahora para mayor beneficio de las grandes multinacionales, con eso para empezar se crearán nuevos puestos de trabajo reduciendo el paro además de hacer a las personas y con ello a los Estados más libres económicamente de estos »nuevos» tiranos del siglo XXI. Pero, ¿algún político actual propone medidas como éstas o parecidas?, no, porque son ya simples peones, simples marionetas.