
Malos tiempos para la derecha y peores todavía para una posible solución que acabe con esta ruina que tenemos encima. Después de la vergüenza y de salir corriendo del Congreso, la maquinaria de sacar un candidato que pueda salvar los muebles se puso en marcha y después de un silencio tenso se eligió por unanimidad al presidente gallego Núñez Feijóo, un globalista que ha convertido Galicia en un lugar donde se margina el castellano y donde este individuo ha dejado ver su lado más intransigente con el tema de las vacunas y el pasaporte COVID.
Si alguien puede querer pensar que este personaje puede llegar a un acuerdo con VOX para dar una patada en el culo a toda esta tropa de comunistas, terroristas y golpistas, va listo. El señor Núñez Feijóo nunca en la vida pactará con un partido de derechas como VOX. Este PP está muerto y eso lo vamos a padecer todos cuando veamos que no se puede desbancar al frente popular con VOX solo y que para cuando estos sean un recambio seguro España habrá pasado a mejor vida.
La situación es muy grave y las consecuencias serán bastante negras. Las ideologías están siendo devoradas por el nuevo orden mundial y las elites globalistas. Están borrando todo lo que tiene que ver con nuestras creencias para convertirnos en súbditos amaestrados.
Después de la debacle de la derecha en toda Europa hay brotes de resistencia, Polonia, Hungría e incluso la Francia de Éric Zemmour,pero hay que ser cautos y valientes para lo que se nos viene encima.
No es broma. Se trata de defender nuestros valores y los de nuestros hijos. Ni más ni menos.
Alejandro Descalzo ( El Correo de España )