
Buenos días:
Pasó, ligera, por mi lado,
y el borde de su falda me tocó.
Y de la isla ignorada de un corazón,
vino a mí un súbito aliento cálido de primavera.
Como la hoja de una flor,
traída y llevada por la brisa,
un ala rápida me rozó un instante
y se perdió al punto.
Fue en mi corazón,
como un suspiro de su cuerpo,
como un susurro de su corazón.
Rabindranath Tagore
Feliz Martes