Ante lo insostenible de su situación, Sánchez insiste en mantener su clásica estrategia y se muestra decidido a doblar la apuesta.
Más allá de su circunstancia judicial, la conducta de Begoña Gómez cada vez se revela menos ejemplar. Tal y como publica hoy ABC, la esposa del presidente llegó a servirse del dominio web ‘.org’, propio de ONG o fundaciones y entidades sin ánimo de lucro para promocionar su empresa personal.
El conjunto de detalles éticamente dudosos empieza a ser demoledor, pero el presidente del Gobierno está decidido a perseverar en el culto a la personalidad como herramienta política.
Pedro Sánchez ha convertido al Partido Socialista en una organización casi religiosa, destinada a rendir homenajes a quien su secretario general decida.
El pasado miércoles, convirtió un mitin de Teresa Ribera en un acto de exaltación de su esposa casi un año después de su última aparición conjunta.
Ni en el PSOE ni en la tradición política española democrática se recuerda algo semejante.
ABC
