Anoche estuve en la entrega de los Premios del Club Internacional de Prensa y mereció el frio de la caminata.
Para no defraudar la tradición del periodismo que no ha muerto ni se ha contaminado del servilismo rampante que protege al poder frente a la objetividad de los hechos, nos llegó la noticia de una agresión brutal de un grupo de abertzales de ultraizquierda contra José Ismael Martínez, reportero gráfico de “El Español”, que cubría una manifestación convocada por Vito Quiles en la Universidad de Pamplona. No he visto la noticia en los medios del régimen.
Hasta aquí los hechos. La interpretación se la dejo a los habituales de la histeria que encuentran un argumento para ignorar cualquier información que les resulte incómoda según sea el protagonista o la víctima, y como “El Español” , periódico que dirige Pedro J Ramírez, está identificado por el gobierno como un medio de la fachosfera, algunos han entendido que lo patriótico es ignorar una agresión violenta contra uno de sus profesionales.
Este comportamiento me trae recuerdos – contrario sensu- de una etapa en la que podíamos pelear por ver quién era el primero que contaba una noticia que mereciera la portada del periódico, pero casi ninguno trabajaba para ocultar una información que molestara al poder, y el evento de anoche fue un ejemplo de la dignidad profesional de quienes merecieron ese reconocimiento.
David Alandete, periodista expulsado de «El Pais» por presiones de Pedro Sánchez según ha declarado en varias ocasiones, incluido el día que compareció en el Congreso de los Diputados, recibió el premio al Mejor Corresponsal Español de manos de Presidente del CLUB , Javier Fernández Arribas. El resto de los Premiados fueron Miguel Angel Aguilar, Pedro J. Ramirez, Sebastián Álvaro, Diego Carcedo, Cécile Tibahud, Antonio Pelayo, Médicos sin fronteras, además de otras organizaciones de reconocido prestigio.
Algunos tenemos esperanza de que el periodismo en España siga siendo independiente y cumpla con su obligación de vigilar y denunciar los excesos del poder político.
Diego Armario
