Llega la noche,
con su cortejo de estrellas,
tan bellas,
que no cabe un reproche,
el fondo azul,
impasible, irreductible,
que las acoge en el silencio amable,
-o mejor-
en la música agradable,
de esas horas únicas,
entre la oración y el sueño.

Feliz descanso y mucho ánimo.