Música en el alma, genera la calma,
reaviva el silencio y su gran misterio.
El cuerpo que escucha pronto la hace suya,
avanza se anima y baila.
Épocas de antaño entre sus estilos,
bailes sin fronteras surgen en los niños.
Hay manos que mueven al compás sus dedos,
escenarios llenos de alegría y vuelo.
Feliz Sábado y mucho ánimo.