Llevan meses vendiéndonos descaradamente la moto de que la política cobarde de entrega al independentismo es buena porque ha conseguido dividir a los enemigos de España, porque ha logrado enemistarles y en consecuencia debilitarlos.
Así Sánchez y los suyos nos han mentido y tratado de engañar vil y rastreramente para hacernos creer que con los indultos y el fin del delito de sedición han convertido a la fiera independentista en un conejillo de peluche.
2- Pues esos que Sánchez dice que ha amansado, premiando su «buen comportamiento» con trozos de la soberanía de los españoles acaban de votar en el parlament, más juntos que nunca, más beligerantes que nunca, que Sánchez tiene que trabajar, dar pasos, hacia la concesión de un referéndum separatista si quiere volver gobernar España.
3- ¿Y ahora qué? Lo que va a pasar es que, como Sánchez va a imponernos su gobierno cueste lo que le cueste a España, los suyos nos van a decir: bueno, oye…, que no es para tanto, dar pasos no significa nada, uno puede empezar a hacer una cosa y después no terminar hacíendola. La derecha, como siempre, está armando una algarabía para crispar porque ver si se puede hacer algo no es lo mismo que hacerlo.
Conclusión: amigos, entendámoslo bien. En el momento en el que Sánchez admita que va a ver si se puede hacer algo sobre el referéndum, en ese mismo instante estará reconociendo, de facto, que los catalanes tienen derecho a la autodeterminación.
Porque, por lógica elemental, nadie comienza a hacer algo si eso no se puede hacer. Ergo, si Sánchez admite que va a dar pasos en pos de la consulta, de hecho está reconociendo que esa consulta es posible.
Lo que quiere decir que cuando Sánchez y los de su gobierno nos digan que se van a iniciar pasos para ver si es posible algo parecido a un referéndum, de hecho, estarán AFIRMANDO: que tú, yo y el resto de los españoles NO tenemos derecho a decidir sobre nuestro país. Así que…, que no te engañen. ¡Esto es lo que hay!
Hernán Pérez Ramos (ÑTV España)