NOTA DE REDACCIÓN: Este editorial fechado el 16 de octubre de 2024, incidía en la urgente advertencia de que Pedro Sánchez no podía estar un día más en la presidencia del Gobierno de España, so riesgo de padece mayores perjuicios cuyo apocalíptico colofón ha sido la dantesca tragedia, en realidad, crimen de la Dana.
Al día de hoy, 16 de noviembre de 2024, nos hemos adentrado en las siniestras maniobras que se deducen detrás del crimen de la Dana. Sospechas de que además de una inepcia criminal se alarga la sombra de la premeditación, el ocultamiento de la masiva destrucción y el número de fallecidos, tal y como sucedió aprovechando dos confinamientos ilegales durante el protocolo eutanásico contra decenas de miles de ciudadanos.
La siniestra permanencia de este desgobierno de desalmados es un riesgo de cariz criminal para una España víctima de estos especuladores sin entrañas, pues la ponzoña de Pedro Sánchez es extensiva a sus numerosos cómplices pagados con el sacrificio y la desintegración de todos los ciudadanos, individual y colectivamente.
Las investigaciones sobre la corrupción de Begoña Gómez han dado con la evidencia de responsabilidad de corrupción directamente promovida por Sánchez. al encontrarse correos de una secretaria dando el visto bueno a la trama y pidiendo fondos con dirección de la presidencia de gobierno.
Pedro Sánchez debe ser imputado ya ante el Tribunal Supremo y apeado con sentido de urgencia de las posiciones que aún le permiten maniobrar delictivamente desde una jefatura de gobierno finiquitada y enfangada de la más pútrida corrupción criminal, como se desprende de todo lo que se va conociendo sobre la implicación del gobierno en la infernal trama del crimen de la Dana.
NI UN DÍA MÁS DEL CRIMINAL PEDRO SÁNCHEZ EN EL GOBIERNO CRIMINALIZADO DE ESPAÑA
Hoy se ha sabido de la imputación del fiscal general, Álvaro García Ortiz, y la chulesca predisposición del sicario a sueldo del capo monclovita para no dimitir; no obstante si la fiscalía depende de Sánchez, pues ya está, la imputación del fiscal es extensiva virtualmente a la del que ha movido los hilos de la corrupción generalizada, incluida esta revelación de secretos que se va a juzgar.
¿Para cuándo la imputación del otro sicario Bolaños y del repugnante encubridor Marlaska? Se comprende el frenesí por culpar al fango ultraderechista que se saca de la manga el delincuente Sánchez para intentar evitar la quema del sanchismo con una previsible pira especialmente montada a propósito de su identidad como el número 1, el «puto amo» y el hijo de la gran ramera que ha identificado con indignación la España decente a la que ha perjudicado traicionera y brutalmente…
Y es más ¿sigue en la presidencia para atar y desatar a su antojo con todo el tinglado de estafa institucional montado, todavía funcionando a su favor? ¿Qué criminal no ansiaría disponer de suficiente poder para esquivar la acción de la Justicia, máxime cuando tiene comprados a jueces corruptos que juegan suciamente a su favor?
Lo cierto es que con lo que se sabe y lo que se sabrá-el grueso de lo que nos queda por conocer-estamos en la certeza irrefutable de que Pedro Sánchez es un criminal metido a política. Su hediondo rastro personal apesta a todo el PSOE sin excepción al día de hoy, cuando tiempo de aberraciones ha transcurrido para que el honrado, si es que lo hay, reflexione sobre la ética y la moral… y no secundar a un gobierno de forajidos.
ÑTV España