La bailarina del futuro
será aquella,
cuyo cuerpo y alma
hayan crecido
tan armoniosamente juntas,
que el lenguaje
natural del alma,
se habrá convertido,
en el movimiento
del cuerpo humano.
La bailarina
no pertenecerá entonces,
a Nación alguna,
sino a la humanidad.
Feliz tarde y mucho ánimo.