No se apresure, caballero…
¿A dónde va tan raudamente?…
¿Qué es lo que usted tiene en mente,
para correr con tanto esmero?.

No me moleste, ando apurado,
pues tengo tanta, mucha prisa,
y aunque pudiera causar risa,
no debo sentirme cansado.

No existe ninguna novedad
y a nadie he pedido visa,
¿por qué camino tan aprisa?…
¡Para que no me alcance la edad!

Feliz tarde y mucho ánimo.

Categorizado en:

Humanidad,

Última Actualización: 22/07/2024

Etiquetado en: