El siniestro canalla de SanchETA, su diabólico padre político “Risitas-Lucifer” y todos sus sicarios, no sólo han cambiado la Historia real, gracias a un PP, tibio, posiblemente masón, pasota, mentiroso y traidor, sino que quieren implantarla ensalzando checas y el terrorismo ateo, la quema de iglesias, cuando disparaban contra imágenes sagradas y profanaban tumbas, como ya reivindicó este miserable criminal de ancianos, con las tumbas violadas de D. Francisco Franco y D. José Antonio Primo de Rivera, con el fin de reivindicar a otros padres y abuelos genocidas.
Las gentes, este pueblo de exenta mente propia, no piensan dejan su racionalidad para que otros piensen y digan lo que les parece. Ellos ceden su mente para que otros la rellenen con sus “mierdades”. España es hoy un pueblo que no ve más allá de las consignas que recibe de sus parias políticos.
Los insensatos creen, como el mal médico: sin estudiar adecuadamente de donde y por qué aparece la enfermedad, sólo receta más y más antibióticos para que siga medicado con la misma medicina que no le sana, sino que le va matando poco a poco cada día.
El diagnóstico y el estudio de la grave enfermedad que padece España son inexistentes. Unos y otros creen que el mal, todos los males en realidad, vienen por el SanchETA y sus sicarios que reciben sus reales de oro y su ego narcisista como pago a la servidumbre. Y unos y otros piensan que la panacea y la salvación de España está en la destitución de este macabro hijo del mismo demonio.
Pensemos por un momento, que logramos echar a ese canalla, adulador del separatismo y protector de sus sicarios criminales.
Miguel Sánchez (ÑTV España)