Lo postrer de Alba Flores, abanderada y pregonera del pasado “Orgullo”, remedando grotesca y bíblica Sodoma. Su cinta LGTBI recauda solo 67.000 euros tras recibir un millón de pavos en ayudas. Rotundo fracaso este fin de semana de la flojísima ‘Te estoy amando locamente`. Alba, hija de Antonio, nieta de Lola.
Pasta y poder, valga el pleonasmo
Recordemos que si el colectivo LGBTI fuera un país sería la cuarta economía mundial. Así lo expuso en su día el informe De LGBTI 350 a LGBTI 400, Orgullo y rendimiento empresarial, publicado por Credit Suisse.
El quebrado banco suizo estimaba que entre el 5% y el 10% de la población mundial se podría encuadrar como LGBTI y poseía unos patrones de gasto similares a los del resto de consumidores, con lo que su PIB se situaría entre los 2,7 y los 5,2 billones de dólares. Por ponerlo con cierta perspectiva pecuniaria, el PIB de Japón (tercera economía mundial) en 2019 fue de 5 billones de dólares, según el Banco Mundial.
Gran Capital y Gran Leviatán, indisimulada y fecunda alianza.
Y sus totalitarios pregoneros elegetebeí e innúmera sopa de letras agregada), como si no quisieran darse cuenta. «Queremos poner en valor el Orgullo crítico, un Orgullo anticapitalista, feminista, no normativo, antirracista, disidente, que apuesta por la versatilidad de la lucha y que señala que no queremos ser moneda de cambio para las élites económicas«,proclamaba la guerracivilista Alba Flores ( «No existe cuneta para meternos a todes«), la nieta de La Faraona, hija del gran músico Antonio, todo ello entre el férvido entusiasmo del público congregado en la madrileña Plaza de Pedro Zerolo ( antigua Vázquez de Mella) el pasado miércoles 28 de junio, » Día Internacional del Orgullo».
Junto a Alba, al lado del escenario, patrocinadores, los cerditos del IBEX-35, por ejemplo. Macho alfa de este año: Prime, plataforma de streaming del gigante de las tiránicas Big Tech, Amazon. Y agreguen, entre otras, la tan detestada para cierta zurda, Coca Cola, El Corte Inglés, BBVA o Air Europa. Y mucho alcohol, que no falte el alcoholismo de masas bajo cualquier pretexto: Arehucas, J&B, Heineken y Larios.
¿Y el Gran Leviatán? Patrocinadores institucionales, dizque. El principal, el Ayuntamiento capitaneado por Carapolla Almeida. Gobierno nacional: Turespaña. Y, por supuesto, la Comunidad de Madrid de la liberticida Díaz Ayuso (y mucho ánimo por el bebé perdido). En fin
Luys Coleto (ÑTV España)
